Cómo hacer un bazooka para niños
A los niños les encantan las manualidades y mucho más si después de hacerlas pueden jugar con ellas. En esta entrada, te vamos a enseñar a construir una bazuca de papel, también conocida como bazooka de cartón, que es perfecta para lanzar bolas de papel con total seguridad y sin miedo a que los pequeños se hagan daño.
Para su elaboración necesitaremos los siguientes materiales:
- Dos tubos de cartón del papel de cocina.
- Un folio o una cartulina para reforzar la estructura.
- Cinta adhesiva de celofán.
- Cinta aislante muy resistente.
- Tijeras.
- Gomas elásticas.
Comenzaremos la construcción de nuestra bazuca casera cortando longitudinalmente uno de los tubos por cada lado, y con los dos trozos que nos quedan, los ajustaremos sobre el otro tubo y los fijaremos con cinta adhesiva para darle mayor fortaleza. Para incrementar aún más la resistencia, enrollaremos el tubo con un folio o cartulina y volveremos a aplicar cinta adhesiva por los laterales y por el centro, asegurando así una estructura robusta para los juegos de los niños.
Cuando tengamos nuestra bazooka de cartón lista, realizaremos dos cortes perpendiculares en cada lado del tubo, partiendo desde un extremo y terminando un poco antes de la mitad. Luego, haremos otro corte un poco más abajo, de manera que nos queden dos rectángulos a cada lado que servirán como surcos.
Con cinta de celofán reforzaremos el interior de esos surcos, ya que por ahí pasarán las gomas elásticas y será una zona de mucho desgaste. Es importante proporcionarle resistencia para alargar la vida útil de nuestra bazuca de cartón.
Ahora llega el momento de colocar las gomas. Vamos a utilizar tres gomas elásticas pequeñas y las sujetaremos con un dedo en el extremo opuesto a los surcos, de forma que encajen en ellos. Para fijarlas, pasaremos un trozo de cinta aislante o mejor aún, cinta americana, lo que dará más resistencia a este juguete.
Si forramos todo el bazooka con cinta americana gris, incluso podemos añadir detalles con un rotulador indeleble negro. Podemos escribir el nombre del niño o cualquier otro diseño que desee. Tras verificar que el mecanismo funciona correctamente, pasaremos las gomas sobre las hendiduras, estiraremos y soltaremos de golpe.
Si todo ha ido bien y la bazuca casera es estable y resistente, es hora de preparar la munición. Podemos usar papeles de publicidad, hojas de periódico o folios usados. Haremos una bola de tamaño adecuado, la compactaremos bien, la colocaremos en la bazuca, tiraremos de las gomas hacia atrás y lanzaremos el proyectil. Gracias a la flexibilidad del diseño, no hay riesgo de hacer daño.
Aprendiendo a hacer esta bazuca de papel, los niños también pueden explorar otras manualidades, como aprender cómo hacer un dado de cartón o cómo hacer un dado en cartulina, que son proyectos perfectos para combinar la diversión con la educación y la creatividad. La construcción de estos juguetes caseros enseña a los niños sobre geometría y les proporciona una gran satisfacción al ver el resultado final de su trabajo. Con un poco de imaginación, ¡el cielo es el límite para lo que los niños pueden crear!